La solución para los pozos de biogás es la cubrición mediante la cubierta de carbón activo Adsorbeco que consiste en una tapa con filtro de carbón activo reforzado con una estructura en polietileno de alta densidad HDPE en la parte inferior y unas orejas que lo permiten instalar y desinstalar.
La tapa es una membrana de poliuretano conteniendo micro-gránulos de carbón activo con un alto poder absorbente y un peso variable de hasta 500 g/m2, reforzado con una red de poliéster para garantizar una perfecta resistencia tanto a la tracción como extensión. Su permeabilidad permite una perfecta transpiración a través del equipo.
Cada tapa se realiza a medida y el tiempo de operación promedio antes de ser sustituido puede llegar a los 12 meses en función de la dimensión de la red de captación de biogás.
Nota: Normalmente la chimenea de salida es ranurada. Es importante cubrir la parte superior con una pieza metálica para evitar que la cubierta de carbón se queme.